Para garantizar la seguridad del suministro de agua y proteger el medio ambiente, es necesario comprender la diferencia entre EDAR (Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales) y ETAP (Estaciones de Tratamiento de Agua Potable). El acceso al agua potable y la correcta gestión de las aguas residuales son importantes para el bienestar y la salud pública en cualquier sociedad.
Por ello, en este post te contamos el significado de EDAR, de ETAP y la diferencia entre ambas que, aunque cumplen funciones relevantes, su propósito y proceso de funcionamiento difieren significativamente.
Matricúlate en el Máster en Depuración y Tratamiento de Aguas y conoce el funcionamiento de las estaciones y los distintos tratamientos.
Índice de contenidos
¿Qué es EDAR?
Las siglas EDAR hacen referencia a Estación Depuradora de Aguas Residuales y se trata de una instalación diseñada para tratar las aguas residuales urbanas e industriales antes de devolverlas al medio ambiente. Su principal objetivo es eliminar los contaminantes y los elementos nocivos presentes en estas aguas, reduciendo el impacto negativo en los ecosistemas acuáticos y protegiendo la salud pública.
El proceso de depuración en una EDAR implica varias etapas, las cuales incluyen:
- Eliminación de sólidos suspendidos.
- Descomposición de materia orgánica.
- Expulsión de nutrientes como nitrógeno y fósforo.
¿Qué es ETAP?
ETAP significa Estación de Tratamiento de Agua Potable y es una infraestructura diseñada para producir agua potable segura y de alta calidad a partir de fuentes de aguas naturales, como ríos o lagos. La función de una ETAP es tratar el agua bruta de los embalses y otras fuentes para convertirla en agua potable y apta para el consumo humano.
Su proceso de tratamiento consta de varias etapas:
- La coagulación.
- La floculación.
- La sedimentación.
- La filtración.
- La desinfección.
Diferencia entre EDAR y ETAP
Las principales diferencias entre una EDAR y una ETAP radican en los propósitos de su funcionamiento y en el tipo de agua que tratan. Así pues, veamos de manera más esquemática a qué nos referimos.
Propósito
- EDAR: su objetivo es tratar las aguas residuales, es decir, aquellas que han sido utilizadas en actividades domésticas o agrícolas y que contienen contaminantes y/o materia orgánica.
- ETAP: en este caso, el agua tratada es cruda y se toma de fuentes naturales para convertirla en agua potable segura y consumible.
Proceso de tratamiento
- EDAR: el proceso de depuración en esta estación se centra en eliminar contaminantes, materia orgánica y nutrientes, con tal de proteger al medio ambiente.
- ETAP: por el otro lado, esta instalación elimina las impurezas y microorganismos que representan un riesgo para la salud humana. De esta manera se asegura que el agua tratada cumpla con los estándares de calidad.
Resultado del tratamiento
- EDAR: finalmente, como resultado del proceso de depuración, esta estación produce agua tratada, la cual puede devolverse al medio ambiente sin causar daño a los ecosistemas acuáticos.
- ETAP: en cambio, la ETAP genera agua potable que cumple con los requisitos sanitarios y de calidad establecidos por las autoridades competentes.
En resumen, tanto las Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) como las Estaciones de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) son infraestructuras esenciales para el tratamiento adecuado del agua y la protección del medio ambiente y la salud pública.