En un mundo donde la sostenibilidad se ha vuelto una prioridad, las células solares juegan un papel crucial en la generación de energía limpia y renovable. Si alguna vez te has preguntado qué son las células solares, qué tipos existen y cómo funcionan, estás en el lugar adecuado. En este artículo, te explicaremos todo lo que necesitas saber sobre este fascinante tema.
Fórmate con el postgrado en energía solar fotovoltaica y amplia tus horizontes laborales.
Índice de contenidos
¿Qué son las células solares?
Las células solares, también conocidas como celdas fotovoltaicas, son dispositivos que convierten la luz solar en electricidad. Esta tecnología ha revolucionado la forma en que obtenemos energía, permitiendo aprovechar la abundante energía solar para satisfacer nuestras necesidades energéticas diarias. Pero, ¿sabías que existen diferentes tipos? A continuación, te presentamos los más comunes.
Te puede interesar: ¿Qué son los estanques solares y cómo funcionan?
¿Qué tipo de células solares hay?
- Células solares de silicio monocristalino: Las células solares de silicio monocristalino son las más antiguas y comunes en el mercado. Se fabrican a partir de un único cristal de silicio, lo que les confiere una alta eficiencia, que puede llegar al 22%. Además, su vida útil es larga, lo que las convierte en una excelente opción para proyectos residenciales y comerciales.
- Células solares de silicio policristalino: Estas se componen de múltiples cristales de silicio, lo que reduce su eficiencia (alrededor del 15-17%) en comparación con las de silicio monocristalino. Sin embargo, son más baratas de producir, lo que las hace populares en instalaciones de mayor escala donde el costo es un factor crítico.
- Células solares de película delgada: Se crean depositando una o varias capas delgadas de material fotovoltaico sobre una superficie. Existen diferentes tipos, como las de teluro de cadmio (CdTe) y las de seleniuro de cobre, indio y galio (CIGS). Aunque su eficiencia es generalmente menor (10-12%), son flexibles, ligeras y pueden ser aplicadas en superficies no convencionales.
- Células solares de heterounión: Estas combinan las ventajas del silicio monocristalino con las capas adicionales de materiales fotovoltaicos para mejorar la eficiencia, que puede superar el 26%. Son más costosas, pero ofrecen un rendimiento superior en condiciones de baja luminosidad.
- Células solares orgánicas (OPV): Están hechas de materiales orgánicos, como polímeros. Son flexibles, ligeras y potencialmente más económicas de producir. Sin embargo, actualmente tienen una eficiencia más baja (alrededor del 10%) y una vida útil menor en comparación con las tecnologías basadas en silicio.
¿Cómo funcionan las celdas solares?
El funcionamiento de las celdas solares se basa en el efecto fotovoltaico. Cuando la luz solar incide en una célula solar, los fotones (partículas de luz) golpean los átomos de silicio en la célula, liberando electrones. Estos electrones libres generan una corriente eléctrica, que es capturada por los conductores dentro de la célula y luego utilizada para alimentar dispositivos eléctricos o almacenarse en baterías.
Además, estas se interconectan para formar paneles, que son capaces de generar cantidades significativas de electricidad. La eficiencia de un panel solar depende no solo de la calidad de las células que lo componen, sino también de factores como la orientación, la inclinación y la cantidad de luz solar que recibe.
Te puede interesar: ¿Cómo funcionan las placas solares en una casa?
Las células solares son una tecnología clave para la transición hacia un futuro energético más limpio y sostenible. Con diferentes tipos disponibles, es posible elegir la solución que mejor se adapte a las necesidades específicas de cada proyecto. Comprender cómo funcionan las celdas solares y qué opciones existen en el mercado es fundamental para tomar decisiones informadas y aprovechar al máximo el poder del sol.